CIUDAD BLANCA 1400 AÑOS

Riqueza arqueológica. Sabemos mucho, pero queda muchísimo más por aprender. He trabajado durante los últimos 20 años en la zona y he podido hallar cientos de sitios, grandes y pequeños, construidos por los antepasados de los pech. Todos los sitios arqueológicos que he podido estudiar fueron construidos entre el año 600 y el 1200 después de cristo. Es decir, entre 800 y 1,400 años atrás. Hay muchos otros sitios que no sabemos a ciencia cierta cuándo fueron construidos, por lo que pudo ser un poco antes o un poco después. Arqueólogos como Paul Healy, George Hasemann y su esposa Gloria Lara también han estudiado las ruinas arqueológicas del este de Honduras.

Antepasados. Casi con certeza se puede decir que los antiguos pobladores fueron los ancestros de los pech y tawahkas. No hay ningún tipo de evidencia de habitantes mayas o de origen tolteca-mexicano en La Mosquitia. La cerámica que se ha encontrado se parece a la de los antiguos pobladores de Costa Rica y otros territorios más hacia el sur. No guarda ningún tipo de similitud con la cerámica encontrada en la región que sabemos fue ocupada por los mayas.

Población. La población más grande parece que tuvo lugar entre los años 800 y 1200 d.C. No sabemos las poblaciones exactas, pero en sitios grandes como Las Crucitas de Aner tal vez habitaron miles de personas. Poblaciones menores a la de Copán, imagino, pero siempre se trata de poblaciones fuertes.

Hallazgos. Todos los sitios medianos y grandes tienen una organización semejante: una zona ceremonial formada por montículos grandes y plazas con zonas domésticas en los alrededores. Construyeron edificios de bahareque y montículos con plataformas.
Estos montículos son de barro o tierra, no son huecos. Los sitios arqueológicos que he encontrado están ubicados normalmente en zonas donde hay llanos o vegas para agricultura. Fueron agricultores, sembrando yuca y tal vez maíz, pero todavía no tenemos datos exactos. Normalmente ubicaban sus asentamientos en una terraza fuera de peligro de inundaciones, aunque siempre cerca de ríos o quebradas.

Causas de extinción. No sabemos. Pero puede ser que poco a poco fueron abandonados los sitios. No hay evidencia de ningún colapso ni nada dramático. Puede ser que fuese un proceso muy gradual, un cambio de forma de vida. La gente no desapareció. Estaban en la zona cuando llegaron los españoles y sus descendientes, los pech, viven allí todavía.

Restos arqueológicos. Hay suficientes restos como para llenar una docena de museos, aunque la información es más importante e interesante que los objetos. Sin información, una piedra es solo una piedra.

Fuente: http://www.elheraldo.hn

 

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